martes, 28 de septiembre de 2010

Del viejo y querido pero obsoleto coliseo 'Toto Hernández' de Cúcuta



Los historiadores del tema mencionan que empezó a construirse en 1945 y se terminó en 1953, año en que fuera inaugurado con el nombre del entonces Presidente de la República, General Gustavo Rojas Pinilla, quien desde la dictadura diera el impulso definitivo para finalizar la obra.

En 1957 la autoridades locales rebautizaron el escenario deportivo para rendir homenaje a 'Toto' Hernández, una de las glorias del baloncesto nortesantandereano por la época.

Pues sí, para quienes no son allegados a la capital del departamento Norte de Santander cabe advertir, entonces, que el coliseo 'Toto' Hernández ha sido desde siempre emblema del baloncesto colombiano, con sobradas razones al ser Cúcuta una ciudad donde el gusto por este deporte se respira en cada esquina.

Alguna vez le escucheé mencionar al fallecido locutor Essau Jaramillo antes de un partido al que había llegado desde el interior del país para hacer su respectiva transmisión radial a nivel nacional, que el botones del hotel, el taxista que lo movilizaba, la señora a la que le compraba el jugo en la esquina y muchos personajes más del común, le hablaban con propiedad de este deporte, de los postes, de los aleros, de los reboteros, en fín.

Cómo olvidar aquellos años del equipo Loteria de Cúcuta en los 80's, el sudamericano femenino de 1983 cuando Colombia se coronara por primera vez campeona en esa categoría empujada por la afición cucuteña, derrotando a Brasil en la gran final en la 'toto'. Luego de ires y venires llegaron los tiempos de motilones BBC, Cañoneros y el quinteto de Cúcuta-Norte, campeón de la liga nacional durante los dos últimos años y apuntándole ahora a su tercera corona.

Mejor dicho, al hablarse de la historia del basketboll colombiano, pese a no ser el país potencia en esta disciplina y tener aún un inmaduro torneo invitacional de carácter profesional, se destaca Cúcuta como gestora de grandes personajes y torneos nacionales e internacionales.

Los anteriores se convierten apenas en enunciados generales para pensar y demostrar que ya es hora de contar en la capital nortesantandereana con un nuevo coliseo de baloncesto, eso sí, que siga llevando el nombre actual. Puede ser en el mismo sitio o en otro, pero los antecedentes dan para reclamar un escenario acorde a nuestros tiempos, pues el actual es vetusto, incómodo y no apto para las competencias que a éste nivel la ciudad se acostumbró a recibir.

La cubierta, aunque llamativa cuando se observa la panorámica de Cúcuta, permite que cuando llueve caiga más agua dentro que fuera de la cancha, por aquello de las goteras. La fachada da lástima; los camerinos para los equipos no resultan lo mejor acondicionados; el maderamen ya reclama cambio, los periodistas no disponen de cabinas de transmisión; las graderias, sin silletería, merecen construirse nuevamente y aprovecharse la ocasión para ampliar la capacidad que el escenario tiene hoy para recibir a los espectadores, aproximadamente en número de cinco mil. Un par de miles de asientos o sitios disponibles más no caerían mal.

Desconociendo cuál sea la decisión final, escuché hace algunas semanas al gobernador del departamento, William Villamizar Laguado, hablando que con remodelar 'la Toto' era suficiente, sobre todo pensando en la celebración de los juegos deportivos nacionales de 2010. Considero que la salida no es esa. Es más, si no se aprovecha la ocasión para tener un nuevo coliseo, pasarán muchos años sin que esta idea se convierta en realidad. Otras ciudades ya han dado el paso, sería increible que la "capital basketera de Colombia" no lo hiciera ya.

El baloncesto cucuteño reclama tener el mejor coliseo del país , algo digno para la mayor afición de este deporte en Colombia. La dirigencia política y deportiva local y regional no puede ni debe ser inferior a este reto. Por estar pensando siempre en pequeño es que estamos como estamos.





miércoles, 8 de septiembre de 2010

La era Santos en RCN, la radio.


Hoy asumió labores como nuevo director del noticiero de la mañana el periodista y hasta hace un mes Vicepresidente de la República Francisco Santos Calderón, cargo, este último, que ejerció durante los últimos ocho años como segundo a bordo de Álvaro Uribe Vélez.

Su antecedente inmediato en el campo periodístico lo había tenido en el diario El Tiempo de Bogotá en donde antes de ingresar a la actividad política había ocupado varias posiciones, entre ellas la de jefe de redacción de dicho matutino, compartiendo labores durante buen tiempo con compañeros como el actual Jefe de Estado, Juan Manuel Santos, su primo.

Llega "Pacho" Santos, como se les escucha mencionarlo a sus amigos, no en calidad de director general de noticias de Radio Cadena Nacional, RCN, sino como el responsable de la primera emisión del día que va de cuatro a diez de la mañana, a diferencia de lo que ocurría con el ya retirado Juan Gossaín y las diferentes emisiones de "Radiosucesos".

Es un reto importante: primero, por lo que ha representado Gossaín para el periodismo colombiano y, segundo, por dirigir uno de los espacios de mayor audiencia dentro de la carta de programación de una de las cadenas más importantes de Colombia.

Además, con Santos Calderón también RCN ha empezado a hacer énfasis en la frase de "la radio que evolucionó", aunque ese camino está aún por recorrerse para que los oyentes sepamos de qué tipo de avance se habla, de cuáles son las innovaciones que en el campo periodístico vamos a poder disfrutar.

En la fecha por razones laborales no pude escuchar el debut del nuevo equipo periodístico de RCN en la mañana, pero entiendo que los desafíos son enormes, en particular para Francisco Santos Calderón, empezando por hacer entender de manera fácil que, aunque se trate de una misma persona, uno era el político y funcionario público, y otro, quien retoma su ejercicio periodístico.

Tambien, que dicho espacio informativo y de opinión no será ventana para hacer defensa gratuita del gobierno del que hizo parte porque, aunque con logros significativos, también dejó en evidencia enormes prácticas clientelistas y de corrupción, que si bien han sido notorias en muchas otras administraciones no pueden tomarse como disculpa o consuelo.

En ese sentido, aplicar lo que demanda el derecho a la información: por una parte, que los medios tengan libertad para ejercer dicha tarea y, por la otra, que los ciudadanos conozcan esa información de manera veraz y oportuna. No hablamos aquí de objetividad si ésta se piensa desde la postura del comunicador que narra los hechos tal cual ocurren (periodismo liberal), como si fuese una especie de Dios, pero sí desde ese deseo ético al que todo periodista debe buscar llegar, para aproximarse lo más cerca posible a la verdad, actuando con honestidad y conocimiento. Es una forma simple de presentar un tema ampliamente discutido y complejo.

En otras palabras, y dados sus antecedentes en la prensa, hay confianza en que eso se cumpla, Francisco Santos Calderón deberá demostrar, salvo mejor opinión, que en el periodismo no hay amigos ni enemigos, aliados ni opositores, familiares ni desconocidos, como sí ocurre en lo que algunos llaman la 'dinámica de la política'.

Por eso, desde hoy, el Presidente Juan Manuel Santos debe ser para Francisco el mandatario nacional y no el primo con poder, no su antiguo compañero de redacción, ni el anterior colega de gabinete. "Credibilidad por encima de todo", repetía con insistencia el maestro Gossaín sentado en la misma silla que desde la fecha ocupa "Pacho".

En el periodismo hay situaciones cotidianas por interpretar y transmitir para, desde allí, ayudar en la formación de los ciudadanos y en la construcción permanente de ciudadanía, a través del debate, del disenso, de la crítica, del control social, de la vigilancia de lo público.

Finalmente, el problema de hacer radio no es el de tener bonitas voces, por lo menos en el campo periodístico. Gossaín, Arismendi y tantos otros personajes lo han demostrado con sonidos vibratorios que algunos tomarían como impensables para el medio. Seguramente Santos Calderón también lo hará. No se trata de timbres propios de quienes atienden 'lineas calientes'. Lo que realmente vale es el sentido de cada frase que se pronuncia, de cada pausa que se hace, de cada noticia que se emite, de cada comentario que se realiza, del proyecto de sociedad democrática que desde una simple cabina puede hacerse a cada segundo.

Francisco Santos Calderón, bienvenido al maravilloso y mágico mundo de la radio.






lunes, 6 de septiembre de 2010

Para no olvidar


Caminaba ayer domingo 5 de septiembre por la avenida cero con calle 5 esquina en Cúcuta, aprovechando el receso de la jornada académica. En ese sector se acomodaban algunas personas con pancartas y otros elementos publicitarios, incluyendo un vistoso ramo de flores, situación que llamaba la atención.

No fue sino preguntar para saber lo que allí ocurría: eran los familiares de una de las cuatro víctimas fatales del accidente de tránsito que, exáctamente un año atrás, había provocado la entonces Secretaría de Desarrollo Económico de la Gobernación de Norte de Santander, Helly Rocío Dávila Jiménez, cuando al conducir un auto bajo los efectos del alcohol (borracha) generó tal tragedía que recayó en personas que por esas cosas del destino estaban en dicho lugar.

Hace apenas unas semanas, luego del juicio del caso, Dávila Jiménez fue condenada a pagar 7 años de prisión.

Una de las personas que hacía presencia en la mañana dominical repartía una hoja con el siguiente escrito, tal cual se deja leer:

"ESTAMOS AQUÍ, PORQUE...

Nosotros jamás podremos olvidarnos del infortunio del día que hizo que nuestras vidas cambiaran.

Nosotros nunca, por más que quisieramos podriamos dejar pasar por desapercibido un día como hoy...

Un día como hoy, hace exáctamente un año atrás '05 de septiembre de 2009', sucedió lo que para muchos de ustedes fue un simple accidente de tránsito y nada más, pero que para nosotros fue el episodio más cruel y doloroso que hayamos vivido, fue el comienzo de un infierno lleno de mucho sufrimiento, porque aquel momento que sin nisiquiera imaginarlo, sin esperarlo, nos golpeó tan pero tan fuerte, que aún nos parece mentira que nos haya tocado justo a nosotros vivirlo. Fue un momento, en el que sentimos demasiada incertidumbre,miedo, rabia y mucho dolor, fue una mezcla de sentimientos escalofriantes,que tristemente dese ese día nos cambiaron la vida.


Nosotros no somos los malos por el hecho de haber reclamado justicia (una justicia que nunca llegó), como muchos lo han señalado, pues no fuimos nosotros quienes arrebatamos cuatro vidas de este mundo, no fuimos nosotros quienes conduciamos aquella mañana a exceso de velocidad, ni mucho menos en estado de embriaguez arrasando con todo lo que se nos cruzara a nuestro paso, fue esa cruel mujer a la que muchos admiran y de la que muchos se conduelen, quien ha hecho tanto daño; daño que no le causó a ninguno de ustedes y tal vez sea esa la razón, para que nadie sienta lo que desde ese día nosotros venimos sintiendo. En efecto, no los culpamos, los seres humanos somos tan indiferentes y tan insensibles, que estamos casi seguros, que nadie se alcanza a imaginar el dolor que aún todo esto nos sigue causando.


En principio, fue muy duro para nosotros tener que escuchar comentarios tan indolentes de algunas personas, como por ejemplo 'los muertos ya no están, el muerto al hoyo y el vivo al baile, pobre de la... que si no se avispa la dejan presa', 'de que quede mal, mejor que se muera' y otra cantidad de comentarios como estos circulaban por las calles, por internet, etc.


Y que tristeza, fueron muy pocos los que se sentaron y se pusieron en nuestro lugar, fueron pocos los que por un momento se alcanzaron a imaginar que mientras nuestro amado esposo, padre, abuelo, hermano, tio y amigo, padecía postrado en una cama de una UCI debatiéndose entre la vida y la muerte por culpa de la irresponsabilidad de una mujer sin verguenza, sin principios, sin moral, nosotros estábamos allí junto a él, sufriendo de la misma manera, haciendo miles de promesas, rogando y suplicando a Dios que no se lo llevara, implorando una oportunidad más de vida no sólo para él sino para cada uno de nosotros, sólo queriamos que se quedara, que compartiera muchos años más de vida junto a nosotros, sólo queriamos que envejeciera en el seno de su familia...


Pero trístemente, el 23 de septiembre de 2009 (19 días después del trágico accidente- 19 días después de tanto sufrimiento,para él y para todos nosotros), ocurrió lo inesperado y sí fue absurdamente inesperado, por más crítico que fuera su estado, nunca aceptamos ni siquiera el hecho de que pudiera morir, todo lo contrario siempre guardamos esperanzas de llevarlo con nosotros de nuevo a nuestra casa, a su hogar, pero como todos saben, no valieron nuestras oraciones, no fueron suficientes las súplicas que hicimos a Dios y hoy ya no está con nosotros.


Nosotros, aún después de un año, quisieramos cerrar los ojos y que al abrirlos nada de esto hubiera pasado, quisieramos despertar contando aún con la presencia de nuestro amado Alirio Pineda, esposo, padre, abuelo y hombre ejemplar, que un día fue separado brutalmente del seno de su familia.


Con la muerte de nuestro amado 'juan', diosito no sólo se llevó a un angelito para el cielo, sino que también se llevó un pedacito de cada uno de nosotros, también se llevó nuestros planes y nuestras alegrías.

Hoy no estamos aquí en busca de protagonismo, estamos aquí porque queremos que no olviden el trágico accidente ocurrido el día 05 de septiembre de 2009, justo aquí en la avenida 0 con calle 5 de esta ciudad de Cúcuta, que tanta pena y dolor nos ha causado,porque queremos suplicarles que por favor se concienticen y nunca conduzcan excediendo el límite de velocidad permitido, ni muchos menos que lo hagan en estado de embriaguez... Por favor no arruines tu vida, ni la de los demás.


'El ya no vive, pero su cariño nos acompaña y protege. Si nuestros ojos no pueden verlo, sea por lo menos siempre el objetivo de nuestro recuerdo, si no podemos hablar con él, jamás dejemos de hablar de él. Volveremos un día a verlo, pero nuestra esperanza está llena de inmortalidad'.

Atentamente, familia PINEDA GÉLVEZ"


De mi parte, sin conocerlos, como simple ciudadano, mi abrazo solidario, como estoy seguro, es el de muchos.

Nota: Las fotografías corresponden al Diario la Opinión de Cúcuta.








miércoles, 1 de septiembre de 2010

Una pobre viejecita llamada 'Banca'


Empezando septiembre la Superintendencia Financiera de Colombia dio a conocer los resultados más destacados de las entidades del sector como consolidado al cierre de julio del presente año.

Confieso que no soy experto en temáticas de éste tipo pero como usuario-cliente del sistema también tengo mis observaciones sobre el particular.

No sé hasta que punto sea ética y moralmente aceptable que en un país donde más de la mitad de su población se debate entre la pobreza y la miseria la ganancia neta de los bancos en los últimos meses haya sido la equivalente a mil 954 millones dólares, una cifra que en pesos de los nuestros suma varios billones (3,57), cifra que se incrementa cuando se revisan las cifras globales que comprometen también a los fondos de pensiones.

Bueno, que haya pobres no es un problema mayor, pues lo verdaderamente importante, según nos han reiterado hasta la saciedad, es estimular y proteger la inversión privada. Bonito el Estado Social de Derecho del que hacemos parte.

Retomando el tema, lo que en definitiva no se entiende es que cuando la banca privada está en peligro por crísis económicas mundiales o nacionales, se acude en su ayuda y se lanzan tablas de salvación con la plata de los contribuyentes de lo público. Ahora, cuando las ganancias de esa misma banca asoma a borbotones, como generalmente ocurre, los ciudadanos del común no ven ventajas diferentes a las de dejarse seducir para endeudarse más, adquirir nuevos préstamos y ampliar sus cupos en las tarjetas de crédito.

Al final la historia es la misma: se terminan re-pagando dos, tres, cuatro o hasta más veces esas deudas, dentro de un marco de necesidades que nuestra sociedad de consumo crea sin el menor desparpajo y que nos tiene a muchos adormecidos.

Los economistas y otros expertos podrán hablar mejor del tema y encontrar razones de aquí y de allá, pero... por qué los rendimientos son tan bajos en las cuentas de ahorro, en los mismos depósitos a término fijo y en cualquier situación que implique dejar la plata en el banco para que la entidade la 'trabaje'?

Además, cualquier servicio se termina cobrando: retirar dinero por ventanilla, retirar dinero de un cajero automático, consultar saldos, etc, etc, etc. Un día de estos nos saldrán con el cuento que pasar frente a las instalaciones de una entidad bancaria también tendrá su costo. La lógica del mercado financiero dice que mientras los usuarios se endeudan y empobrecen, a los dueños del sistema les faltan dedos y ojos para poder palpar y contar sus ganancias.

¿Qué puede pensar la familia que está a punto de perder su casa porque a pesar de haberla pagado ya todavía le debe al banco? ¿Qué el estudiante a punto de desertar del sueño de convertirse en profesional porque lo poco que le llega es para pagar las cuotas que debe? ¿Qué la persona que fue a retirar 200 mil pesos del cajero, éste no los desembolsó, si los digitó y lleva esperando tres meses a ver si el banco reconoce el error y reembolsa el monto?

Mejor dicho, no sabe uno que es más perverso, si el famoso gota a gota o la cuota mensual que llega cada mes por correo certificado. Con razón las pirámides, las otras, y no las justifico tampoco, hicieron fiesta en Colombia.

Si antes cuando cualquier persona iba de compras le echaban de ñapa un aparato celular, hasta que el mercado se inundó, con razón hoy lo mismo sucede con los préstamos bancarios: hay tanta planta producto de las ganancias del sector privado que a quien se descuide le 'chutan' unos pesos para libre inversión (acompañados de sus respectivas tarjetas de crédito).

Supongo que los empleados del sector bancario son los mejores pagos del país, empezando por los cajeros que atienden en las ventanillas, al igual que las señoras que se encargan de los oficios varios... Con semejantes ganancias no se puede esperar menos.

No hay de otra, tocó volver a meter la plata debajo del colchón, aunque estoy pensando como opción a corto plazo en venderlo para abonar una platica que le debo al banco, principalmente por intereses.